domingo, 11 de enero de 2015

Je Suis Charlie, Nous Sommes Charlie.

"El talento al final viene por medio de un conocimiento adecuado de estrategias que permitirán no aniquilar al enemigo sino que este deje de serlo" Ángel Cabalístico Yelahiah

Hoy, domingo 11 – ene - 14, se reunieron más de un millón de personas en Paris, y más de 50 líderes mundiales, en una marcha de protesta, por el asesinato de 12 personas, a manos de extremistas islámicos, que luego fueron muertos por la policía francesa. Si estuviera en Paris, estaría marchando. Sin embargo, en ausencia de la oscuridad, la luz no sería luz, y por consiguiente, creo que el mundo deberá reflexionar sobre este y otros sucesos oscuros, para atraer la luz, y trascender la Ley del Talión, que ha permanecido en toda la historia de la Humanidad, sin que hasta ahora, podamos acabar con el enemigo.
En el A.T. en los libros de Éxodo, Levítico y Deuteronomio, la Ley del Talión, señala ojo por ojo y diente por diente, para hacer justicia. Jesucristo, en el Sermón del Monte, la abolió, sin embargo, el mundo antiguo y moderno, tanto cristiano como islámico y judío, la practican y de ahí, la justificación de todas las guerras y la respuesta al terrorismo. La experiencia valida el conocimiento y la experiencia nos muestra que con esta Ley del Talión, no hemos podido superar los conflictos entre los unos y los otros, con sus múltiples tonos, religiosos, políticos, económicos, sociales, seguridad nacional, entre otros.
La ley de la Humanidad es diferente a la Justicia Divina. La religiosidad es diferente a la espiritualidad. ¿Porqué con tantas leyes hay tanta injusticia? ¿Por qué con tantas religiones, hay tanto desamor? El mundo está siendo manejado por la razón y dejo a un lado el corazón; acogió el secularismo y dejo a un lado a Dios; enaltece al becerro de oro que se pavonea en Wall Street y se olvido de su naturaleza espiritual; educa desde la ciencia y olvido la conciencia; educa premiando la memoria y la repetición y desestimula la reflexión y el encuentro personal con la ética.
Si realmente queremos vivir en amor, libertad y paz, debemos comprender que la experiencia que hoy vivimos, obedece a unas prácticas morales, que no son las más sabias, porque estamos alejados de la Sabiduría. Una de ella es la Ley del Talión. No podemos seguir matando a nuestro enemigo, porque el mal se alimenta del mal, y la muerte, no es ética, aunque moralmente, la acepten todos los países del mundo, con sus ejércitos y policías. La guerra, la muerte y la violencia, no es la solución a los conflictos religiosos, políticos, económicos, sociales, personales, familiares, sentimentales y de todo tipo, que podamos tener. Debemos buscar estrategias para que dejemos de ser enemigos y trascender aquellas que buscan aniquilar al enemigo.
Debemos trascender hacia un desarrollo sustentado en el desarrollo integral del Ser Humano, que es la unidad básica de la Humanidad. Somos 7.000 millones de seres humanos que conformamos la Humanidad. La conciencia colectiva es un ente real, dinámico y con un gran poder inconmensurable. La conciencia individual la conforma  los sentimientos y el pensamiento de cada persona. Todo es energía y la conciencia es energía y por la Ley de Vibración, las energías afines se atraen y por consiguiente, el miedo atrae el miedo y la suma de conciencias individuales, conforman una conciencia colectiva, que si está cargada de temor, atraerá el terror.

Jesucristo, enseñó que ante la agresión, poner la mejilla y sé que ninguno de los cristianos católicos, protestantes y ortodoxos, lo acepta. ¿Somos o no somos cristianos? ¿Qué significa realmente poner la otra mejilla? Personalmente, ha sido la enseñanza más difícil que he aprendido. Pero solo hasta que comprendí, que la luz desvanece a la oscuridad, me di cuenta que poner la mejilla, es amar al enemigo y diseñar estrategias para que deje de serlo y de ahí la importancia de aprender Sabiduría.
Debemos empezar que Todos Somos Uno, que cada causa tiene un efecto y que somos el espejo del otro. Por eso, Je Suis Charlie, Nous Sommes Charlie.